martes, 16 de agosto de 2011

Atardeceres en la playa




Lo que más me gusta del verano, es la playa, pero sobretodo ir por la tarde.
Cuando los rayos del sol son inofensivos y hacen brillar tu piel, ya morena.
La brisa mueve tu pelo lentamente y el ruido de las olas del mar relaja tus oídos, acostumbrados a escuchar gentío, motores de coches, ladridos... 
Y sin que te des cuenta se pasan las horas así. Paseando por la orilla, descalza, viendo a tu derecha el mar, inmenso, junto a la Luna que ya empieza a aparecer y a la izquierda el Sol, naranja, que se va escondiendo a cada paso que das, y el cielo, azul y naranja a la vez. Y lo único que te apetece en ese momento, es que sea para siempre.

viernes, 5 de agosto de 2011

Inmersión

¿Nunca has experimentado la sensación de estar bajo el agua? Una pregunta irónica, todo el mundo ha vivido ese momento alguna vez, pero...¿Os habéis parado a pensar lo increíble que es? Cuando estas bajo el agua y no oyes ningún ruido a tu alrededor, estás completamente aislado de lo que ocurre en la superficie, nadie te puede molestar y en cada movimiento, sientes que tus brazos y tus piernas se mueven con facilidad sin tener que hacer esfuerzo, que tu pelo se va ondeando y alisando y las pequeñas burbujas que salen de tu nariz, salen al ritmo de tu respiración. Son momentos no demasiado largos porque tienes que salir a respirar aire, son efímeros, pero a su vez, son momentos reconfortantes. Momentos en los que nadie puede hacerme daño, y me siento protegida. Lo único ''malo'' de esto es que no hay nadie que me acompañe salvo mis pensamientos, y mis pensamientos siempre llevan a ti. Llevan a tus sonrisas, a tus miradas y a tus gestos... Y es lo que me hace salir, pero incluso al salir, cuando no queda nadie en la piscina, y es de noche, y no tengo más compañía que la Luna, me siento mejor que nunca.